Los productores están trayendo colmenas de abejas para polinizar la próxima cosecha en febrero y marzo
Por Elizabeth Fichtner, asesora agrícola de UCCE y Caleb Crawford, asistente de investigación del personal de UCCE
La mitad del invierno marca el comienzo de la temporada de floración en el sur del Valle de San Joaquín. La floración de los almendros crea una llamativa exhibición de flores blancas a mediados de febrero y continúa hasta principios de marzo en el condado de Tulare. Mientras disfruta de la espectacular exhibición floral, aquí hay algunos consejos para ayudar a mantener la seguridad personal y obtener una mejor apreciación de los procesos que ocurren en los huertos de nuestra región.
Durante el período de latencia y latencia retardada, los productores de almendras ya están activos en la protección de la futura cosecha contra plagas y enfermedades. Los cultivadores sacudirán los frutos secos residuales de los árboles. Estos viejos frutos secos, conocidos como “momias”, pueden albergar larvas de gusano naranja navel (una plaga de insectos de las almendras) y esporas fúngicas de podredumbre marrón (una enfermedad de las almendras). La eliminación de momias es un método no químico de control de insectos y enfermedades.
Además, durante la temporada de latencia, varias plagas de insectos se controlan con la aplicación de aceite de latencia. Los aceites son un ejemplo de una “química suave” utilizada como insecticida porque alteran el exoesqueleto del insecto y tienen un efecto mínimo en los animales vertebrados y los humanos. Si las poblaciones de plagas son altas, se puede agregar un producto insecticida adicional a la aplicación de aceite latente. Estos productos se aplican durante la temporada de latencia tanto para lograr una mejor cobertura de aspersión como para mitigar el impacto de los insecticidas en las abejas. Durante la floración, también se aplican fungicidas para proteger las flores de enfermedades. Si la lluvia ha hecho que el piso del huerto sea intransitable para equipo pesado, algunas aplicaciones de rociado pueden hacerse por aire. Como resultado, para mantener la seguridad y respetar la propiedad privada, es mejor disfrutar de la floración desde fuera del huerto, a menos que el productor lo invite al lugar.
Debido a que las almendras son polinizadas por abejas, las colmenas se llevan a los huertos a fines de enero. Se requieren más de dos millones de colmenas para dar servicio a la polinización de la cosecha de almendras de California. Las abejas se importan a California desde todas partes de los EE. UU. Las abejas no son agresivas con los humanos mientras vuelan en el huerto; sin embargo, las abejas pueden ser agresivas al proteger su colmena. Como advertencia, las abejas pueden disfrutarse y observarse mientras están lejos de la colmena, pero las colmenas no deben tocarse ni manipularse. Las colmenas se retirarán de los huertos al final de la floración, generalmente a mediados de marzo.
Las condiciones climáticas durante la floración pueden influir en gran medida en el rendimiento obtenido durante la cosecha. Las temperaturas nocturnas bajo cero pueden dañar las flores. Las temperaturas diurnas que oscilan entre 60 °F y 90 °F promueven la polinización y la actividad de las abejas. Un breve respiro del invierno lluvioso, combinado con temperaturas moderadas durante la floración, beneficiará el conjunto de la cosecha de almendras de 2023.
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